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sábado, 31 de enero de 2015

Reseña sobre Campos de fresas, por Fernando Arroyo







Reseña sobre Campos de fresas

Jordi Serra i Fabra es un autor precoz. Con tan sólo 12 años ya se había lanzado a escribir una novela de gran extensión. Fue un estudioso de la música y un gran escritor de literatura juvenil. Destaca por haber obtenido muchos premios, tanto en castellano como en catalán. Y es importante mencionar  la Fundación Jordi Sierra i Fabra que creó en el 2004 para fomentar la literatura entre los jóvenes.[1]
            Campos de fresas es la historia de una joven que acaba de ser intoxicada por el consumo de una pastilla de éxtasis (que después descubrirán que es, más bien, EVA). La novela mantiene al lector en un estado de tensión constante puesto que da la sensación de que cada página que pasamos, a Luciana le queda un instante menos de vida. El relato nos documenta acerca del peligro que corren los jóvenes en la actualidad ante la moda de las drogas sintéticas, las cuales muchas están adulteradas y pueden ser mortales para individuos que presentan anomalías en su organismo.
            Este libro es un aviso moralista a los jóvenes por medio de una trama en la que la protagonista, Luciana, está inconsciente en el hospital de principio a fin de la obra. Luciana era jugadora de ajedrez, una chica inteligente y buena estudiante. Sin embargo, a ella también le ha rozado el mundo de la droga, y de una forma letal. Una noche de fiesta, siguiendo por inercia a sus compañeros, que querían “quitarse el estrés de los exámenes”, Luciana engulle una de esas pastillas de la media luna después de haberse gastado en el estupefaciente un dinero que hasta a ella misma le cuesta creer que sea capaz de pagarlo. Dinero que sólo le va a servir para comprar una gran desgracia. Y ahora, la joven se debate entre la vida y la muerte mientras un médico analiza la sustancia y un detective sigue la pista al camello para descubrir de qué materia estaba compuesta la pastilla.
            Hay tres personajes en la novela que son mis preferidos y quiero destacar por el carácter tan marcado y propio que poseen. Por una parte, tenemos a Eloy, joven valiente enamorado de Luciana que peleará hasta la extenuación por dar con el camello. Infatigable y despierto, lo conseguirá mediante el apoyo de sus amigos, a los que ha conseguido reunir para acompañarlos en su persecución. Y, pese a que el corrupto muera, parte de la droga necesaria quedará a salvo. Hecho que, supuestamente, es lo que devolverá luego la vida a Luciana. Por otra parte, tenemos al periodista Mariano Zapata, ambicioso, interesado pero también moralista, empeñado en sacar a Luciana como titular para alertar a la sociedad del peligro de las drogas modernas. Y por último, quiero también señalar la presencia de Loreto, la amiga bulímica, quien creará casi en silencio, un pacto de salvación con Luciana en el que, pasito a pasito, comenzará a salir de su infierno.
            Los capítulos vienen introducidos como si se trataran de movimientos en una partida de ajedrez contra la muerte. La vida no siempre es un campo de fresas, aunque, en esta historia, por suerte o por ficción, ganan las blancas.
















[1] http://es.wikipedia.org/wiki/Jordi_Sierra_i_Fabra
                                     

miércoles, 28 de enero de 2015

Reseña sobre Memorias de una vaca, de Bernardo Atxaga. Por Fernando Arroyo Botella

Reseña sobre Memorias de una vaca, de Bernardo Atxaga

Bernardo Atxaga es un licenciado en Económicas vasco que, entre todos sus quehaceres, un día decidió dedicarse exclusivamente a la literatura.   
Aparte de haber dado una gran expresividad al euskera como lengua culta, debemos también destacar a Atxaga por su defensa de la autonomía de la literatura, la cual dice ser “vehículo de la humanidad”.[1]
En Memorias de una vaca, la historia gira en torno a Mo, una vaca que vive en Balanzategui y es vendida al convento de una monja francesa que la trata muy bien. Paulina Bernardette (la monja) le cuenta historias y parece entretenerse mucho con ella.
La vaca Mo refleja muy bien los problemas reales de una persona humana pero desde el cuerpo de una vaca. Escucha a menudo la voz de su conciencia a la que decide llamar El pesado por lo tormentosa que es cuando le da por aconsejar. Cuentan las leyendas que esa voz es el Ángel de la Guarda, y que todas las vacas la escuchan constantemente. Pero Mo vive este hecho con mucho desenfado a pesar de que, todo lo que le dice, siempre es cierto. La conciencia siempre tiene la razón, voz interna que enseguida podemos identificar los lectores humanos ya que, todos la tenemos cuando más la necesitamos.
La vaca Mo se hace una amiga, La Vache Qui Rit, que en español es La vaca que ríe. La llamaban la cabezona por las coces que daba pero, un día, gracias a un niño que la llamó La Vache Qui Rit, esta cambió su nombre ya que le parecía mucho más simpático. Es interesante observar el contraste que ofrece este personaje, que debate su personalidad entre su cuerpo de vaca y su actitud salvaje de jabalí. La Vache Qui Rit es agresiva. Siempre que alguien se lo merece no duda en “romper huesos” como ella dice. Y su voz interna no parece la de una vaca, sino más bien la de un jabalí, pues siempre le está pidiendo que dé coces y que se escape al monte para poder correr en libertad.
La amistad que hay entre La Vache Qui Rit y Mo conlleva también cierta competición, pues hay un dicho que afirma que “no hay nada más tonto que una vaca tonta”, y es por ello que, a lo largo de todo el relato, vamos a ir apreciando esa rivalidad entre ambas por querer expresar agudeza y agilidad de pensamiento. Resulta muy divertido la caricatura que hace el escritor del esfuerzo que tiene que hacer la vaca por pensar, que cada vez que reflexiona sobre algún asunto o intenta resolver un caso, cae rendida de cansancio y necesita dormir.
La verdadera trama de la obra aparece cuando Mo, después de un intenso trabajo intelectual que la dejaría hecha polvo, descubre que el El encorvado y Genoveva (matrimonio de cierta nobleza que convivían con las vacas en Balanzategui) suministraban sacos de arroz a los soldados del ejército, y que, para no ser descubiertos por los Hermanos dentudos, lo hacían de la siguiente forma: cuando los hermanos estaban presentes, metían las vacas rojas en un recinto para comer pienso, alertando, de este modo,  a los del monte del peligro que corrían. En cambio, cuando los hermanos no estaban, metían a las vacas negras, dando así la señal de que podían venir a por los respectivos sacos. Este entramado en el que, un día, por error de cálculo, los hermanos se enteran y matan de un disparo a El encorvado, nos acerca a la historia de nuestra guerra civil española.
Más adelante, La Vache Qui Rit y Mo son vendidos a unos jovenes que las llevan a las fiestas de un pueblo donde son maltratadas. Y después, se fugan, y se van al monte donde La Vache Qui Rit encuentra a sus semejantes salvajes: los jabalíes.
Memorias de una vaca es una novela juvenil que nos acerca a unas vivencias vacunas extraordinarias, pero también a la realidad de la historia y de los sentimientos humanos.

                                                  
                                               



[1] http://www.atxaga.org/bernardo-atxaga

sábado, 24 de enero de 2015

Voces en el parque

En el siguiente comentario vamos a hablar de la obra literaria Voces en el parque, escrita por el autor inglés Anthony Browne y publicada en el 1999. Se trata de un álbum ilustrado y, a este respecto, es relevante la formación del autor (estudiante de Diseño Gráfico), pues es él mismo quien realiza las ilustraciones del mismo.

Antes de adentrarnos en la finalidad didáctica que esta obra pueda tener en un contexto educativo, hablaremos, aunque de manera global, del argumento de la misma. Y apunto de manera global puesto que, a mi parecer, lo relevante de Voces en el parque no es su argumento, sino su contenido implícito. Se trata de un libro en el que confluyen cuatro voces que nos narran un mismo hecho desde su propia perspectiva: el encuentro en un parque. Una de ellas, la primera, es una madre de buena familia que sale al parque a pasear a su mascota Victoria con su hijo Carlos. La madre pierde de vista a su hijo, por lo cual se asusta, y, cuando lo encuentra, lo ve con una niña que, a su parecer, no es buena compañía para su hijo puesto que pertenece a una clase social menor, por lo que decide que deben volver a casa. A continuación, la segunda voz corresponde a un padre cuya situación económica parece menos favorable al observar el barrio donde viven y el hecho de que busca trabajo en el periódico. Decide ir con su hija Mancha y su mascota Alberto al parque, donde se encuentra con los protagonistas de la primera secuencia. Finalmente, deciden regresar a casa. Seguidamente, aparece otra voz narrativa, la de Carlos, el hijo de la primera narradora. Se destaca lo aburrido que está el niño y lo bien que se lo pasa cuando descubre a otra niña, Mancha. No obstante, tal y como veíamos en la primera secuencia, la madre no le gusta la compañía de la niña y decide que se vayan a casa. Por último, la cuarta voz narrativa es Mancha, que nos cuenta la historia que había contado su padre: van al parque con su mascota Alberto, se encuentran con Carlos, juegan y la madre decide que se tienen que ir a casa.


Establecido el argumento del libro, apuntaré algunas consideraciones sobre el uso de este libro como material de lectura en clase. Se trata de una lectura que aplicaría en una aula de la ESO, concretamente los primeros ciclos. La razón es que este libro busca la creación de inferencias por parte del lector, estadio esencial en el proceso de formación de un lector competente. Es por ello que considero que este libro es adecuado para alumnos que estén en proceso de formar esta competencia lectora. Además de este objetivo, que podría insertarse entre los objetivos generales de la materia de Lengua y Literatura castellana, podemos usar esta lectura para atender a uno de los temas transversales asignados a la Comunidad valenciana: la igualdad. Este libro puede ser un pretexto para crear un debate en nuestra clase sobre la idea de igualdad y cómo podemos aplicarla a nuestra sociedad. Tanto la construcción de inferencias como la comprensión de este tema transversal no se logra solo con la lectura del texto, sino que en este objetivo cobra un especial interés la interpretación de las ilustraciones: las tonalidades, las alusiones a obras pictóricas (El grito, El caballero sonriente, La Gioconda,…),…

viernes, 23 de enero de 2015

Xavier Docampo, Cuando de noche llaman a la puerta ·.· por Ignacio Yarza


Xavier Docampo, Cuando de noche llaman a la puerta, Ilustraciones: Xosé Cobas, editorial Anaya, Madrid, 1996.




Título original: Cando petan na porta pola noite, Edicións Xerais, Galicia, 1994.
Francisco Xavier Puente Docampo, escritor y maestro, nace en 1946 en Lugo. Entiende la biblioteca como un lugar de encuentro, algo que va más allá del espacio que la configura y en el que encontrar libros y estanterías es solo el comienzo de un viaje apasionante. Por ello lo podemos considerar, además de un animador a la lectura, un formador de lectores.
Su dedicación compagina la Literatura Infantil y Juvenil con la docencia. Ha publicado también novela (O libro das viaxes imaxinarias, Xerais, 2008) y ensayo (Falar e escoitar, Xerais, 1992). En 1995 recibe por la obra que reseñamos el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil.

http://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/entrevista-a-xavier-puente-docampo--0/video/
Pincha en el icono para escuchar una entrevista al autor.

El duende verde
La colección «El Duende Verde» es de aquellas que albergan una voluntad de canon. En este caso, Anaya, la tiene para con la Literatura Infantil y Juvenil. Cuando detrás de un libro existe un proyecto editorial concreto, estudiado, valorado no solo bajo criterios económicos, cabe pensar que existe algo valioso, más allá del dinero. Desconozco qué criterios sigue Anaya, aparte de los que trasluce la lista de 94 publicaciones hasta 1996. En ella aparecen títulos como A bordo de la gaviota (Fernando Alonso),  El hombre que perdió su imagen (Sierra i Fabra), Montes, pájaros y amigos (Montserrat del Amo), o El hijo del jardinero (Juan Farias).

 Xosé Cobas y Xavier Docampo
 Cuando de noche llaman a la puerta
El título es ya una llamada a la imaginación, una excusa o punto de partida: a partir del aldabonazo (o timbrazo, o golpe seco de puño cerrado), es cuando comienza esta historia, compuesta por cuatro relatos, abrigados por una invitación a la lectura y un poema en el que «el autor habla de sí mismo», con voluntad de humanidad.  
«Querido Lector» prepara a la audiencia. Esto que parece un contrasentido, se traduce en escuchar leyendo. «El fenómeno literario es probable que sea más un fenómeno de escucha que un fenómeno de expresión», dice Docampo.  Algo que como bien apunta es discutible, pero que encierra sin duda una verdad inherente al ser humano: necesitamos contar para escucharnos, necesitamos escribir para leernos, necesitamos escribir, escuchar, leer, contar historias (parafraseo algunas ideas del autor en la entrevista enlazada en el icono de la Cervantes).

«El espejo del viajero» es un encuentro fugaz entre dos seres idénticos que acaban tratando de asesinarse. Un desdoblamiento de la personalidad, accesible al lector de 12 años. «El Hornadas» narra, a través del relato que viaja hasta el lector, la historia de Teixo: aquel que junto a otros dos campesinos, asesinó a una vieja y quemó su cadáver. El recurso de contar la historia a través de aquellos que la contaron, permite reencontrarse con el sentido primario de la literatura.

Con «Loba», naturaleza y hombre se enfrentan. Los aullidos atemorizan a una pequeña aldea. La caza. Animales que no llegan a herir por voluntad de atacar a los aldeanos, sino por defenderse de la persecución a que son sometidos. La historia de nuevo contada como algo vivido, que a su vez se transmite de padres a hijos. La visión de la loba: «ojos como de hierro candente». Un final trágico.

Todos los relatos abordan el tema de la muerte. Diferentes perspectivas, motivos, pero todos lo abordan y despliegan la reflexión. «El cumplemuertes» la lleva escrita en el título. Un señor, anónimo, recibe año tras año una misteriosa carta, en la que le felicitan por el día en que va a morir. Algo le evita a este señor el destino fatal: el derecho a ejercer su libertad.

Trabajar estos relatos en el aula de tercer ciclo de primaria o primer ciclo de secundaria, puede permitirnos entablar un diálogo con los estudiantes que explore inquietudes universales: el destino, la muerte, la libertad, el miedo,… Inquietudes como las que el poema final nos revela, imposible de comentar sin repetir lo que bien expresa por sí solo:

TENGO MIEDO…
Cuando de noche llaman a la puerta.
A estar solo cuando no quiero estar solo.
A estar entre mucha gente.
A quedarme solo en el mundo.
A no morir nunca.
A morir pronto.
A morir estúpidamente en una carretera.
A quedar inútil.
A enloquecer.
A que les pase algo a los míos.
A que los que quiero no me quieran.
A perder el gusto por las cosas que me gustan.
A tener que vivir siempre en una ciudad.
A que no haya flores.
A que no haya animales en libertad.
A no poder mirar las estrellas por las noches.
A no poder mirar el paisaje en otoño.
Al mar (desde el mar).
A mirar un día hacia el cielo y no ver pájaros.
A que no haya truchas en los ríos.
A tener que ir a la guerra.
A la guerra, aunque no tenga que ir.
A las almas miserables.
A los que siempre dicen la verdad.
A los que mienten siempre.
A pasar hambre.
A los cuentos de miedo.
A las películas de miedo.
A ir al dentista.
A no tener miedo a nada.
A tener mucho miedo.
Cuando pasa mucho tiempo sin que nadie llame a mi puerta
A…

El polizón del Ulises (Azddine Archid)

                                               El Polizón del Ulises, Ana María Matute
                                                          (Azddine Archid Allali)
                                           


 La autora estructura esta narración en forma lineal en trece capítulos en los que relata la vida del protagonista. En los dos primeros habla del hallazgo del niño y su educación y luego de sus aventuras.
La novela narra la historia de un niño abandonado dentro de una siesta a lado de  la puerta de tres hermanas solteras, que no querían formar una familia.
Estas hermanas que buscaron  los padres del niño sin éxito decidieron adoptarlo  y llamarle Marco Amado Manuel, aunque todo el mundo lo conocerá como Jujú. Cada una de estas tres hermanas lo educara según su visión. 
Jujú No iba al colegio porque estaba muy lejos de casa, por lo tanto creció sin amistad, tenía como amigos  a un perro, un gallo y una perdiz posteriormente se les unirá un potrillo llamado Rimo, todos estos animales le acompañaran en sus aventuras que él se inventaba.
 Las aventuras transcurrirán en el desván que convirtió en su propio velero “Ulises”. Un día Jujú descubrió que este desván que había convertido en su velero  tenía  un cuarto secreto.
Pasados los  años, una noche de invierno su tía le mando por leña al garaje, pero al ir allí encontró un hombre herido que le obligo a traerle comida y vendaje.
 A raíz de una serie de acontecimientos esté fugitivo se convertirá en su amigo y Jujú le dará cobijo en la habitación secreta que había encontrado en  el desván hasta que se curre y así iría con él.
Este libro se lo recomiendo a alumnos de primero y segundo de la educación secundaria obligatoria, ya que pueden sentirse identificado con el protagonista, puesto que es el paso de la niñez a la adolescencia. Ana María Matute es una escritora realista que trata temas morales y sociales como se observa claramente en esta obra, ya que en este libro se ven reflejados una serie de valores como la amistad, la lealtad, la libertad y la maduración como persona.
En cuanto a la escritura tiene un lenguaje sencillo y está escrito  en tercera persona, con intromisiones de la primera persona





                     

AZDDINE ARCHID ALLALI



                     "CAMPOS DE FRESAS"
                       (Azddine Archid Allali)


El escritor Jordi Sierra i Fabra nos delata otra vez con una de sus obras juveniles. En la que trata de concienciar o dar una serie de valores a los adolescentes de varios temas, todos ellos de actualidad, estos temas que desarrolla son por ejemplo la amistad, el sexo, el amor, bulimia y la droga especialmente la de diseño. También realiza una reflexión sobre lo inconsciente que son los jóvenes a la hora de tomar las drogas.
La obra “Campos de fresa” es una novela corta,  cuyo argumento o trama se desarrolla en pocas horas. La historia empieza cuando un grupo de amigos decide tomar unas pastillas de diseño para prolongar la noche de fiesta, y estas pastillas provocaron en una de las chicas del grupo, concretamente en Luciana un golpe de calor y posteriormente  un estado de coma, durante su estado de coma es donde transcurre la historia.
Considero importante señalar que esta obra es recomendable esencialmente para los adolescentes de 12 o 13 años, ya que muchos de los cuales se pueden sentir identificados con algún personaje que configura la obra. Y también porque Jordi Sierra i Fabra utiliza un lenguaje adecuado para lectores de estas edades, ya que la mayor parte de las construcciones sintácticas son sencillas y breves, es decir que son generalmente oraciones simples, del mismo modo utiliza un léxico fácil de comprender salvo cuando emplea términos que hacen referencia al campo de la medicina. 
Otro aspecto a destacar, es que la obra tiene un estilo directo marcado por los diálogos dinámicos, a mi modo de ver este libro justifica la afirmación de que Jordi Sierra i Fabra es el rey del dialogo.
Y para acabar hay que señalar que la obra está escrita en tercera persona, salvo cuando Luciana habla en subconsciencia y lo hace en primera persona.


"Campos de fresa" Carolina Cano Gil

Campos de fresa

            La adolescencia es una etapa complicada, no solo para los niños que dejan atrás su infancia, sino para los profesores, que deben afrontar este periodo con la idea de ayudar a asimilar todos los cambios que se pueden producir en ellos. Campos de fresa de Jordi Sierra i Fabra plantea uno de los problemas que más preocupan a los padres: las drogas. Emili Teixidor (1995) afirma rotundamente que leer literatura es fundamental para el desarrollo personal de los adolescentes y en esta base se apoyan novelas como la que estamos tratando en esta reseña.

          Luciana tiene una vida normal: novio, amigos, estudios… Sin embargo, un sábado noche decide tomarse una pastilla en la discoteca a la que va con su grupo de amigos. Su cuerpo no la tolera y entra en un grave coma del que solo podrá salir si encuentran el tipo de droga que le suministraron. A esta tarea se pone Eloy, su novio, que comienza una intensa búsqueda del camello que se tropezó con Luciana. Esta responsabilidad genera en él la necesidad de madurar ante lo ocurrido y, por ello, el proceso que encontramos en la obra hasta que, finalmente, se resuelve todo es un ejemplo de crecimiento personal del protagonista. Además, Eloy se va encontrando con numerosas tentaciones a las que están expuestos los jóvenes de hoy en día y, por tanto, intenta concienciar de las consecuencias que tienen.
        
         Estamos ante una novela muy atractiva para trabajar en el aula de 3º de Secundaria, puesto que no solo la trama principal es interesante, también tenemos los conflictos de otros personajes como la mejor amiga de Luciana, Loreto, que está luchando para vencer la bulimia. Además, tenemos la actitud de los amigos que están en la discoteca cuando se toma la pastilla, un punto que podemos utilizar para abrir un debate en una de las sesiones de post lectura. Todos los personajes, en definitiva, pueden servirnos de excusa para ahondar en las opiniones que tienen los alumnos sobre el tema: qué harían si fueran los padres, ¿y el novio?, ¿dejarían a un amigo tomar droga? y un largo etcétera cargado de reflexiones. Este tipo de actividades, como añadido, ayudan a trabajar la empatía de nuestros jóvenes adolescentes, ya que deben ponerse en la piel de más de un personaje para contarnos cuál sería su actitud.